he arreglado el llavero precioso que me compré en assisi.

(ya he dado por perdido lo de no llamar a las cosas por su nombre, y voy por la vida diciendo torino, firenze, milano, assisi)

esta tarde en el todis el conductor del coche que nos lleva a casa si nuestra compra supera los cincuenta euros (se ha dado el caso) nos hadicho que esperasemos cinco minutos. rosel y yo nos hemos mirado de reojo y hemos dicho a la vez "una cigaretta"

habíamos podido decir mil cosas o no haber dicho nada o haberlo dicho en castellano, pero no, hemos dicho "una cigaretta" las dos a la vez y después nos hemos echado a reir como imbéciles durante tres minutos.

por cosas así me jode la vida que rosel se vaya la semana que viene. a lo mejor la rapto, o le escondo el dni para que no pueda salir de italia, o la emborracho muchísimo la noche antes para que pierda el tren para roma (esto último no parece demasiado complicado)

estoy un poco triste. vamos a ver airbag. porque te I love you, y yo me alivio. tenemos una 8.8 y una peroni. las cosas funcionan.

italia es mía. esa sensación permanece cuando las noticias van llegando. italia es tan mía como la cerveza doppio malto o la playa de breixo.

son cosas que no se pueden tocar. pasear por la ribera del tévere contigo al lado y ver como la luz progresivamente se vuelve más densa es algo mío y de nadie más.


me gustaría hacer una entrada larga sobre este tema, pero airbag me espera y ahora mismo, de momento, no tengo suficientes armas.