giovedì 20 agosto 2009

básicamente, playas llenas de horas y olas llenas de guiños. a lo mejor es que el sol me deslumbra los ojos o a lo mejor es que en galicia tenemos cuevitas como las que los florentinos construían en las escaleras que suben hasta la piazzale michelangelo.

tardes de cerveza y aceite. así de fácil. ahora mismo un día es como setenta y dos horas y dormir importa lo justo. dos conciertos esta semana y las cosas siguen saliendo bien, muy bien. merece la pena. dejar que todo siga saliendo, las miradas cómplices y las cosas que no sabes muy bien como explicar pero que a veces te queman en el pecho y que a veces son agradables funcionan. prestan. así de fácil, prestan.

ahora todo es insultantemente fácil, como si nada hubiera empezado todavía, nada en el mundo, como si el espacio que te rodea fuera una crisálida sin violar, lo único sin violar de tu mundo, tú, niña, que eres tan poco virgen que tu piel debería ser blanco roto y sin embargo te untas con aceite de palma para disimular.

aceite de palma. puta bíblica. uvas, queso y vino. martini con hielo, pastel de berenjena y helado de chocolate.





(subir las olas y el vértigo voraz que es un vértigo pequeñito comparado con otros adyacentes. la suma de los vértigos es igual al cuadrado de la sensación de





recordar


o ver



cuerpos que salen del agua como si tampoco nada hubiera salido del agua antes. catársis, nacimiento, orgasmo.)




---laberintear las cosas que son sencillas en plan poetada en plan en el fondo lo que pasa es que todo tiene un sentido primario y unitario todo es un ciclo kármico y llegamos aquí por una razón y la respuesta a todos los dilemaos fundamentales del hombre es una mano encendiendo un mechero y unos labios alrededor de un cigarro que tiemblan un poquito.



ortega y gasset no tenía ni puta idea.