mercoledì 30 settembre 2009

conozco esta sensación


cuatro de la mañana, frío, tabaco, nada en los bolsillos y demasiado espacio por todas partes.

podemos ser felices en dos metros cuadrados. pensé muchas cosas en porto, caminando, marcando otra ciudad que será para siempre inevitablemente (tuya)-(mía)-(nuestra) una muesca más la goma de mis braguitas. porto, vinho en la ribeira do douro, la luz tan dorada, la noche, espejos, las sillas de cocacola y la tensión ambiental de demasiada sociedad socializando.

verborrea vino de alentejo y francesinhas.


pero conozco esta sensación, cuatro de la mañana, y reconozco la sensación también de que lo peor de las ciudades es saber a quién no te vas a encontrar al girar cualquier esquina, corunha, campamento base. todas las tropas han partido y al pie del cañón quedamos unos cuantos, helándonos de frío y sentados en corro en las escaleras esperando a que abra el rus.


ahora mismo poesía queda poca. siguiente nivel: "abrazarte en el metro, besarte el cuello y notar como todo encaja igual igual que un puzzle diabólivo" o "los patos, el chiste de la creación" o "última noche en aveiro, pensamiento principal: necesitamos, de verdad que necesitamos una banqueta alta como las de las barras de los bares"


pensé muchas cosas en porto pero nada de tipo amorcéntrico, más bien rollo culturetasocialidealista, esas cosas que siempre me acabas echando por tierra a la tercera copa con tu insultante practicidad de chicodecienciasqueestudiaunacarreratécnica pero ahora la verdad es que no me acuerdo de ninguna tesis y tampoco importa mucho porque las conclusiones son obvias: son las cuatro de la mañana y tengo frío, mucho frío, a pesar del veranillo de san martín que se me cuela por debajo de la ventana.


(pero al tercer día resucitó. sábado, shabbat, descanso. sabado, día de saturno, padre de zeus, padre de todos los dioses. también me he pasado toda la semana haciendo ejercicios de comparación lingüística entre demasiadas lenguas y a cierto nivel estoy esquizofrénica y paranoica y veo raices comunes por todas partes pero eso es otra historia y deberá ser contada en otra ocasión)