mercoledì 4 novembre 2009

ah, qué bello momento el de la una de la tarde, cuando miré el reloj, me di cuenta de que llevaba rato sin hacer nada (y tengo que hacer flor de cosas) y pensé: bueno, es la una, es imposible que esté todo el día sin hacer nada.

ahora son las seis y media. estoy entrando en fase "calculemos qué pasaría mañana si hoy no hago todo lo que tengo que hacer"


dentro de un rato me pondré una peli y asumiré que la bajura y yo iremos de la mano hasta el fin de mis días.


(mentira, ahora me pongo, tengo las poéticas al lado ya)