domenica 8 agosto 2010

hoy mi madre me ha dicho que no me preocupe, que no soy tonta, que lo único que pasa es que todavía no ha llegado el hombre de mi vida. yo me he callado, mejor, le he dicho que a mi me da igual, que no necesito a nadie, que no puedo evitar ser entregada al principio, y darlo todo, y que no voy a perder la ilusión. pero lo que mi madre no sabe es que ya he tenido quince o treinta hombres de mi vida y que cada vez me da más igual todo, la verdad.
de todas maneras, se agradecen los consejos de madre, que huelen un poco a sección femenina o a feminismo de palo, aún no sé, parece un artículo de la revista elle cuando me dice que a mi nadie tiene que decirme que soy guapísima y listísima y que valgo muchísimo. y me pongo a llorar y me escondo en mi cuarto. claro mami. una cosa es que me ría por todo mientras comemos y otra muy distinta que no me muera por dentro.


y dos apuntes al margen: ahora mismo lo que más me apetece es cascarme una sesión de vivalaguerra tirada en la cama; y rancid en el coche volviendo a casa de resaca es lo que más puede cundir del mundo. y la empanada de atún.