giovedì 23 luglio 2009

todo es como el año pasado, pero más refinado. como si el verano pasado se hubiera destilado y dispuesto en finas botellas de cristal de murano

(venezia febrero 2009 el atardecer venezia surgiendo del suelo y venezia girada follándose el agua del gran canal venezia y tú y un mapa y besos por las calles en todos los puentes porque los puentes nos son intrínsecos. los canales también)

vestidos y zapatos de tacón y términos financieros y huevo deshaciéndose en la boca y coto de imaiz y sobre todo la media de cinco horas diarias de sueño y seis cafés al día y comer prácticamente nada y seguir caminando y que las cosas fluyan metefórica y literalmente.


dos minutos de éxtasis rebotando contra el techo tres cuartos de hora de siesta. hablar de la infancia. os diplomáticos de montealto.


oggi é mercoledi. y estoy tan cansada que sólo puedo pensar así, sin organizar las frases. antonio me llamaba mercoledi porque un día fui a casa de rosel sin peinar, con el pelo destrozado y espeso como si fuera un cocker spaniel negro. mercoledi. yo me enfadaba y le llamaba stronzo y le enseñaba un dedo y nos reíamos. después le daba besos y abrazos a josep. josep y los vulcanes. rosel y el cartel de la feria de baeza.


las tardes perfectas en corso garibaldi, con el olor del etruschetto colándose por la ventana e incitándonos a comer pizza todas las noches.


las tardes perfectas en tu casa sin hacer nada más que jugar entre las sábanas y acariciarte el pelo e ir rodando el uno contra el otro, ocupando todo el espacio posible. mis pies en tu ventana. the doors, la plantilla d soziedad alkohololika en la pared. tu habitación cada vez más desnuda y o cada vez más desnuda.

un poco así. julio. xullo. luglio. metátesis de cantidad. pienso en la etimología de cada término financiero nuevo que entra en mi vida y echo de menos estudiar de verdad.


sueñez.................. no mucho más. hay muchas cosas estos días, pero están demasiado mezcladas con café como para que se entienda mucho.